Opinión
¿Que significa el 12 de octubre para lxs negros?
Arelly Cortes Castillo
" La historia eurocéntrica nos ha presentado a un experto navegante y descubridor, un ser que no sabía qué existiría al cruzar el atlántico. La imagen de Cristóbal Colón la puedo considerar como un hombre narciso, ensimismado en su propio Yo, no veo a un descubridor. "
El punto de partida inicia hoy, donde la sociedad mundial está bombardeada por la tecnología, ahora existe más información y por tanto, más interés en conocer la historia de lo desconocido, a la que antes no se tenía acceso. En países de tercer mundo, las bibliotecas han sido clasistas, mientras que, en países de primer mundo se tiene acceso a libros que difícilmente un país latinoamericano tendría acceso, mucho menos en una biblioteca de algún barrio popular en ciudades o favelas latinas. Las nuevas generaciones están despiertas y se habla de descolonizarnos al igual que desmitificar muchas historias que han sido contadas de una manera heroica para mantener arrodillada a una sociedad periférica que se encuentra en desventaja con las del “primer mundo”, el primer mundo hegemónico, supremacista colonial. Como diría la inglesa Rene Eddo-Lodge “la Justicia no existe, solo existimos nosotros”.
La historia eurocéntrica nos ha presentado a un experto navegante y descubridor, un ser que no sabía qué existiría al cruzar el atlántico. La imagen de Cristóbal Colón la puedo considerar como un hombre narciso, ensimismado en su propio Yo, no veo a un descubridor. ¿Cómo pensarse que descubrió a América, un territorio que ya era habitado por la población indígena? Las palabras tienen poder, y las personas del continente americano, europeo y africano han estado bajo esa idea “el amo” desde las clases de ciencias sociales y de historia; que Cristóbal Colón fue el descubridor de América, quien encontró una multitudinaria comunidad indígena con terrenos llenos de riquezas hídricas, recursos naturales, alimentos, productividad, costumbres culturales, lengua y características físicas diferentes. Mirar cualquier imagen con la que se presenta a Cristóbal Colón, es ver la similitud de un hombre con poder que subordina a la América Precolombina, la del hombre blanco sin rasgos visibles aparentes de discapacidades, a la hegemonía blanca con el espíritu supremacista. Analizar las características de la vestimenta de Colón, es ver a un tipo con perfil sacerdotal, en los retratos se mira la postura dominante con los indígenas a su alrededor arrodillados, como él decía: nuestros “hermanos esclavos”.
Aunque varios historiadores de Colón cuentan que era un hombre con poca educación y formación, que explica la justificación adversa a la esclavitud, se lleva el título de gran navegante. En el imaginario de quienes despiertan ante semejante falsedad ha quedado en la conciencia colectiva que, el imperialismo surgió y la dominación se ha mantenido mediante diversas formas de opresión. Propongo rebajar el lenguaje del español promedio que considera sus ancestros han hecho un gran favor al ir a “civilizar” a los indígenas, latinos, africanos, porque les ha servido para alardear el proyecto “día de la hispanidad”. Al igual que otros españoles, en el hoy por hoy, consideran que colonizar el continente Africano ha evitado la propagación de enfermedades con una visión muy paternalista al respecto. La civilización trae un concepto de virtudes propias de una sociedad burguesa, de una clase acomodada y de que ésa debe ser la aspiración de cualquiera que no haya nacido en esas circunstancias de derechos privilegiados a costa de la delincuencia. La civilización es el modelo creado por europeos como un modelo ideal de imitación, lo que refleje lo contrario es digno de civilizar. Civilizar es una empresa creada, una institución que justifica la dominación y quien no aspire a civilizarse estará condenado a mil formas de opresión, diría Cervantes.
En otro sentido, el filósofo Condorcet, antiesclavista y anticlerical, intentó hacia el siglo XVIII, dedicar reflexiones sobre la esclavitud y la opresión hacia las personas negras, incluso habló sobre las implicaciones de una posible abolición de la esclavitud, donde los negros estarían condenados a seguir siendo serviles de la hegemonía colona. Condorcet acuña razones por las cuales se justificó la esclavización de las personas negras en África, una de ellas, considera que autores eurocéntricos definen la esclavitud como un acto humanitario, porque para un negro era mejor ser esclavo que ser libre, estar libre era cuestión de salvajismo. Esta cuestión es falsa, desde el punto de vista anatómico y funcional las razas humanas compartimos idénticas y aparentes capacidades físicas de conocimiento e inteligencia. ¿Quién decide qué es mejor para un pueblo ajeno a sus raíces, su cosmovisión y territorio? Según este razonamiento, los europeos son culpables. Desde mi punto de vista son culpables de una lista interminable de delitos, del derecho penal e internacional de crímenes históricos de lesa humanidad, estos delitos tienen la característica de que nunca prescriben. Los colonizadores a nombre de Colón, han destruido matrimonios, han separado a niños de sus familias, han violado, robado y maltratado la dignidad humana de las personas negras e indígenas; los niños nacidos en las plantaciones, han nacido sin derechos humanos, han buscado dominarlos como cualquier animal de ganadería en cuanto a trato, uso y comercio, los colonizadores mataron cualquier estatus de dignidad, dejando profundos traumas que solo se han curado encontrando la espiritualidad, sanando el alma porque los niveles de opresión y exclusión se mantienen en la sociedad indiferente. La semilla mala sembrada por Colón dio fruto que hasta los gitanos que llegaron a España no se salvaron, los sometieron a una histórica esclavitud, violencia y exclusión que persiste a estos días. Gracias a los ancestros negros han dejado una historia épica de lucha cimarrona que debe correr en las venas de cualquier negro concientizado de la historia de esclavitud, encontrando respuestas a las estadísticas capitalistas de desigualdad social.
Los europeos son culpables de la infamia, de fomentar guerras entre los pueblos africanos, una de las pruebas evidentes del espíritu destructivo, de bandidos y delincuentes, es la historia ancestral europea que se maquilla con la ilustración, época donde el 70% de los europeos eran analfabetos. Como ejemplo, tenemos la guerra provocada por los belgas en Ruanda. Los tutsis demandaron libertad y cómo dirían los grandes líderes de la historia “la libertad puede tener el precio de la muerte”. Los colonos belgas convencieron a los Hutus y lograron derrocar a los Tutsis en 1959. En 1973 los hutus logran ascender al poder y posteriormente, no hace mucho, el mundo fue testigo de cómo el odio impregnado ocasionó una matanza de 100 días lamentables. Las historias de esclavitud a raíz de la colonización son cuestionables porque en la actualidad persisten formas de control sobre la población nativa en países oprimidos. La estructura administrativa colonial se instauró en los nuevos modelos de gobierno de países “independizados”, pues no han sido modificadas en su base estructural. Con lo cual, se mantiene la categorización racial y de clase, perpetuando la división entre la misma población nativa.
La mal llamada conquista ha servido para estimular codicias y pasiones desenfrenadas. A partir de Colón, europeos han constituido a nombre de un genocida, la muerte en vida de personas esclavas arrebatándoles su libertad. Nada justifica la dominación y expolio a la personalidad de los indígenas y negros en contra de su humanidad. Nunca será concebible pensar que los indígenas y negros amenazaran los territorios europeos para que Colón cometiera genocidio en connivencia con la iglesia católica, dominación justificada con violencia de la que fueron coautores la iglesia católica. La violencia perpetrada prometió hacer ricos a los reyes católicos, cortaron lenguas, piernas y brazos, imponiendo un idioma que no era el de nuestros ancestros. ¿Acaso no fue en nombre de Dios que hizo genocidio? Un Dios que confuso de la locura en la que se había convertido el mundo, de las perversiones y el desquicio de estos colonos.
La clase intelectual de América, actualmente replica elementos racistas del proyecto europeo para mantener el estatus del hombre moderno. Lo cierto es que, los procesos de deshumanización y la racialización provocaron el destierro y exterminio de una población civilizada con una cultura, valores y costumbres diferentes al de los europeos. Todo esto trajo consigo el paternalismo y formas de dominación que como consecuencia trae la negación del otro. Actualmente, se muestra de manera heroica en museos y actos públicos la ruta de navegación de Colón como actos heroicos por mantener la riqueza de las castas españolas. Si se asociara la palabra conquista o descubrimiento por genocidio, España y Europa dejarían de ser lo que son hoy, manteniendo el privilegio a costillas del sacrificio, sudor y sangre de nuestros hermanos negros, indígenas y de cualquier origen africano o latino. Así que acudir a la memoria histórica pese a la amnesia colectiva que lleva al europeo supremacista mantener el estatus a través de la negación será una tarea permanente. La negación de la opresión y esclavitud es una camisa de fuerza que hace que el europeo promedio se sienta avergonzado. De aquella idea de humanidad no queda sino la leve esperanza.
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